PARTE HISTÓRICA
1. LA CREACIÓN DEL COMUNAL
Vasconia fue un territorio muy romanizado, pero su lengua se salvó en el proceso de su romanización. Se puede considerar por ello que se salvaron también una serie de valores implícitos que pudieron contribuir a que tuviera lugar la Revolución Bagauda y, a partir de aquélla, a la creación de la sociedad comunal.
Las tres fuentes constitutivas de la Revolución Altomedieval son:
a) La cosmovisión de los pueblos prerromanos. Aunque las fuentes romanas no aclaran con precisión cómo era, podemos afirmar que se mantuvo como base y sustrato popular (saberes, idea del mundo, manera de relacionarse, etc.).
b) El cristianismo revolucionario con su concepción de la comunidad de bienes.
c) El lado oculto de la sabiduría de Grecia y Roma, copiado en los monasterios. Nos referimos al sector crítico con el Imperio romano (Horacio, Juvenal, Cicerón…).
La fusión de estas tres fuentes dio origen a una sociedad muy potente, con sus limitaciones y errores que la acompañaron desde los comienzos.
El cristianismo es ante todo un fenómeno ideológico y lo más importante son sus conclusiones acerca de cuál debe ser la respuesta última ante el poder romano. Ellos habían comprendido que la ideología esencial del Imperio romano era el poder, la violencia, el terror, la propiedad privada, etc., así que elaboraron un plan de acción que iría en contra de todo esto. Establecieron la noción del universalismo, evitando suicidarse en un levantamiento armado prematuro para tratar de extenderse por todo el Imperio, para ir minándolo desde dentro y preparar una acción por todo su territorio.
Los valores del cristianismo son:
• El amor fraterno como ordenamiento de la sociedad.
• El colectivismo como forma de organización económica.
• La libertad individual.
• El gobierno por asambleas.
• El armamento general del pueblo.
• La idea de revolución (Apocalipsis).
• La magnificación del trabajo productivo (exigencia del trabajo manual)
• Ideología del esfuerzo y del dolor (filosofía cínica).
• Concepción del ser humano como sujeto bipartido, en continuo conflicto consigo mismo.
La gran persecución por parte de Roma ocurrió con Diocleciano, en el siglo IV. Una vez que mataron a los mejores, el emperador Constantino creó con los que sucumbieron a las torturas y con los que se pasaron a la policía romana el Concilio de Nicea. De ahí surgiría la Iglesia Católica, que sería la sucesora del propio Imperio.
Los cristianos auténticos que se resistieron a formar parte de la Iglesia Católica constituyeron un movimiento que en la Península Ibérica sería conocido como monacato cristiano. de ellos se derivaría, posteriormente, la aldea.
En las actas de los concilios toledanos se puede ver cómo los visigodos entraron permanentemente en batalla contra los vascones, de los cuáles no citan jamás el nombre de autoridad alguna. Esta sociedad fue capaz de vencer a los cuatro grandes imperios de la época sin descomponerse. Su modelo de sociedad se fue extendiendo por el este y por el oeste, llegando su influencia incluso al otro lado de los Pirineos (Monasterio de Cluny).
El principal enemigo al que se enfrentaron las sociedades comunales fue el Imperio Islámico. En Al-Ándalus no hubo Comunal. Era imposible que lo hubiera, dadas las características de la sociedad islámica. Se trataba, como el resto de las sociedades autoritarias, de una sociedad jerarquizada, profundamente esclavista.